Un Cirujano Maxilofacial se ocupa de la reconstrucción de las fracturas de la cara ocasionadas por traumatismos, y la cirugía ortognática para corregir las deformidades craneofaciales como los aumentos verticales y horizontales del maxilar y mandíbula. Realiza la reconstrucción de pacientes con labio y paladar hendidos, así como las secuelas de dicho padecimiento.
Los principales tratamientos que realiza un Cirujano Maxilofacial son la cirugía bucal, que involucra la extracción quirúrgica de órganos dentarios retenidos (siendo los más comunes los terceros molares o “muelas del juicio”), lesiones y tumores de los huesos y tejidos blandos de la cavidad oral. Así como el tratamiento de la disfunción de la articulación temporomandibular que se caracteriza por dolor constante en la región anterior al oído el cual se incrementa durante la masticación.
Las muelas del juicio por lo general emergen de las encías entre los 17 y 24 años de edad. Son los últimos de los grandes molares en la parte posterior de su boca. Algunas personas nunca desarrollan estas últimas muelas, pero se puede llegar a tener hasta cuatro: una en cada esquina de su boca. La extracción de muela del juicio dependerá del espacio que haya en la boca para cada una de las muelas.
Normalmente puedes saber si te están creciendo las muelas del juicio cuando tienes algunos síntomas como dolor o inflamación en la zona, e incluso infección en algunos casos, pero no siempre se presenta esta sintomatología.
Sacar la muela del juicio quirúrgicamente puede aliviar los síntomas de los molares impactados. Lo mejor es que un cirujano maxilofacial realice el procedimiento para evitar que seas lastimado o se lleve un tiempo mayor la extracción, en CEODENT un especialista realiza las cirugías de terceros molares.
Es importante que entiendas los cuidados después de sacar una muela. Si es necesario, puedes tomar un analgésico de venta sin receta, por ejemplo, paracetamol o ibuprofeno.
No enjuagues vigorosamente tu boca durante las primeras 24 horas después de la extracción de una muela del juicio, ya que esto puede perturbar los coágulos de sangre que ayudan al proceso de curación.
Debes comer alimentos blandos y volver poco a poco a tu dieta habitual una vez que tu mandíbula se sienta menos rígida.
Si las encías sangran, dobla un pañuelo limpio o una gasa, colócalo donde sangra la encía y muerde durante al menos 10 a 15 minutos. No enjuagues tu boca o te acuestes hasta que el sangrado se haya detenido.